Durante junio pasado, las ventas del comercio minorista mando señales de alerta en el comportamiento del gasto de las familias mexicanas.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los ingresos de los establecimientos del comercio al por menor disminuyeron 0.38% en el sexto mes del 2025, respecto a mayo pasado, tras un crecimiento previo.
“En junio, los ingresos por suministro de bienes y servicios de los comercios minoristas registraron un retroceso mensual del 0.4%, tras el repunte observado en mayo; lo que sugiere que el dinamismo del periodo previo fue en mayor medida a factores transitorios (…) a su interior se observa un desempeño heterogéneo por subsectores, lo que refleja debilidad en los niveles de consumo”, señala Monex.
Hacia adelante, expone que el gasto de los hogares se mantiene con un sesgo de cautela, ante los bajos niveles en la confianza de los consumidores y el inminente riesgo de presiones inflacionarias.

Ventas a la baja
De los 22 giros minoristas, nueve mostraros descensos en sus ventas durante el sexto mes de 2025, destacando los negocios de ropa, bisutería y accesorios de vestir con la caída más pronunciada.
“El mayor dinamismo se observó en los artículos vendidos por internet, impulsados por la campaña del Hot Sale. Por otro lado, destaca la caída mensual de 5.9% en las ventas de tiendas departamentales, mientras que las tiendas de autoservicio mostraron un ligero aumento de 0.1%. Ambas fueron afectadas por un menor dinamismo debido a la temporada de lluvias”, detalla Ve por Más (BX+).
Si bien el consumo podría verse soportado por una tasa de desempleo estable alrededor de 2.7%, añade, las decisiones de gasto de los hogares pueden estar resintiendo la desaceleración en la generación de empleos formales.
“Este comportamiento se ve acompañado el deterioro en la confianza del consumidor, una menor entrada de remesas y una inflación que en junio superó el 4% anual. Estos factores, configuraron un entorno menos favorable para el consumo al cierre del segundo trimestre”.
Consumo con un menor dinamismo
Para BX+, en principio, el consumo privado puede encontrar cierto respaldo en el bajo desempleo, el crecimiento en los salarios, la moderación en la inflación en alimentos y el fin de la agresiva temporada de lluvias.
No obstante, agrega que el gasto de los hogares puede seguir presionado por la baja generación de empleo formal, la incertidumbre económica y condiciones crediticias aún restrictivas —incluso considerando las bajas en tasas de interés por parte de Banxico.
El grupo financiero prevé que lo anterior limite principalmente las decisiones de consumo discrecional de las familias.
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