El secretario de Energía de Estados Unidos, Chris Wright, reconoció este jueves que el compromiso adquirido por la Unión Europea (UE) de aumentar hasta 750,000 millones de dólares sus importaciones energéticas desde el país norteamericano es un reto «muy ambicioso», pero posible de cumplir.
Wright ofreció estas declaraciones tras reunirse en Bruselas con el comisario europeo de Energía, Dan Jørgensen, en el marco del reciente acuerdo comercial entre ambas partes que evitó una posible guerra arancelaria.
Dentro de este pacto, la UE aceptó incrementar sus compras energéticas a Estados Unidos y aplicar aranceles de 15%.
«Estoy de acuerdo en que el objetivo es muy ambicioso», señaló, para después explicar que esta es una práctica común de la Administración de Donald Trump porque «si no apuntas alto, no llegas alto».
El funcionario estadounidense señaló que alcanzar la meta depende de tres ejes principales: sustituir el gas natural ruso con gas estadounidense, reemplazar los productos derivados del petróleo importados desde Rusia y fortalecer la cooperación nuclear mediante proyectos de gran escala y nuevas tecnologías.
«Si haces esas tres, llegas», resumió Wright, al recalcar que Estados Unidos es el mayor productor mundial de petróleo y que ambas partes comparten entusiasmo por un «renacimiento nuclear», resumió Chris Wright, el secretario de Energía de Estados Unidos.
Con información de EFE
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