La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, solicitó este lunes a Estados Unidos que la decisión de abrir o cerrar la frontera al ganado mexicano no sea discrecional, sino que se base en criterios técnicos, tras el brote de la plaga del gusano barrenador detectado en Nuevo León.
“Lo importante aquí es que un acuerdo con el gobierno de los Estados Unidos que no fuera discrecional la decisión de abrir o cerrar la frontera, sino que fuera con base en una serie de indicadores técnicos y eso lo aceptaron y es lo que está por definirse en unos días”, apuntó la mandataria.
Sheinbaum recordó que un equipo de la Secretaría de Agricultura estadounidense estuvo en México para evaluar las medidas de control contra la plaga.
Exportaciones y pérdidas en México
México es uno de los principales proveedores de ganado bovino hacia Estados Unidos, con exportaciones que superan el millón de cabezas al año.
Sin embargo, el cierre parcial de la frontera ya ha generado pérdidas estimadas en 1,300 millones de dólares y ha detenido el envío de al menos 650,000 cabezas de ganado, según datos del Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
Ante este panorama, el Gobierno mexicano puso en marcha un programa de apoyo para mitigar el impacto económico.
Programa de apoyo para ganaderos
Ante este panorama, el Gobierno mexicano puso en marcha un programa de apoyo para mitigar el impacto económico.
El esquema contempla recursos por más de 2,181 millones de pesos, de los cuales cerca de 600 millones serán aportados de manera directa por la Federación.
Mientras que el resto se complementará con créditos y aportaciones estatales para engorda de animales y construcción de centros de producción.
Con información de EFE.
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