Valery Lisboa: “Toda nuestra materia prima proviene de minas certificadas”

Valery Lisboa, directora de la joyería de autor Imelda de Val, inició su camino en 2007 con una inversión inicial de 2,000 soles y un enfoque en joyas de plata. Lisboa se formó como diseñadora y especialista en diamantes en el GIA de Nueva York. Su empresa, que ahora trabaja exclusivamente con oro proveniente de minas certificadas Fairmined, ha logrado posicionarse como una marca de lujo en Perú y España.

Valery Lisboa, directora de la joyería de autor Imelda de Val, inició su camino en 2007 con una inversión inicial de 2,000 soles y un enfoque en joyas de plata. Lisboa se formó como diseñadora y especialista en diamantes en el GIA de Nueva York. Su empresa, que ahora trabaja exclusivamente con oro proveniente de minas certificadas Fairmined, ha logrado posicionarse como una marca de lujo en Perú y España.

Lisboa destaca la importancia de una cadena de producción limpia, la sostenibilidad y el empoderamiento social como pilares de su marca. Su nueva colección, enfocada en el ópalo azul peruano, busca revalorar esta gema nacional. Además, planea abrir una tienda en Madrid en 2025 para consolidar su presencia internacional.

Con un propósito alineado a sus valores personales, Lisboa busca generar impacto positivo, promoviendo la minería responsable, el desarrollo del país y la resiliencia de las mujeres.

¿Cómo iniciaste en el mundo de la joyería?

Mi primer trabajo fue como anfitriona en un supermercado, promocionando biblias de lujo. Salí muy joven de Chiclayo y llegué a Lima con poco dinero. Pasé por varios trabajos hasta llegar a un banco, pero no sentía que estuviera alineado con mi propósito. Mientras trabajaba allí, una tía que vive en Suiza, y que fabricaba joyas de plata, me animó a aprender sobre el proceso de producción. Visitamos talleres y compramos materiales, y me enamoré del oficio. Comencé diseñando piezas para mis amigas del banco, y verlas lucir algo hecho por mí fue una experiencia maravillosa. Finalmente, renuncié al banco y fundé mi empresa. Posteriormente, estudié diseño de joyas, técnicas de joyería y me certifiqué como especialista en diamantes en el Instituto Gemológico de América (GIA) en Nueva York.

¿Empezaste trabajando solo con plata?

Sí, trabajé con plata durante tres años. Luego, alguien me pidió anillos de matrimonio de oro, y ese fue el punto de partida para trabajar con este material. Después llegaron los pedidos de anillos de compromiso.

¿Cuáles han sido los factores clave para el crecimiento de tu empresa?

El sector es muy competitivo y está marcado por la informalidad. La costumbre de comprar oro por gramo fomenta la minería ilegal. Aunque no soy perfecta, he aprendido sobre sostenibilidad y cómo posicionarme en el mercado. Siempre he priorizado una cadena de producción limpia y he buscado un público que valore el trabajo artesanal y bien hecho. La resiliencia, la perseverancia y la confianza construida con mis clientes han sido fundamentales.

Actualmente trabajas con mineros artesanales legales, ¿cierto?

Sí, toda nuestra materia prima proviene de minas certificadas con el sello Fairmined, que garantiza trazabilidad y buenas prácticas. Estas minas no usan cianuro ni mercurio, lo que evita graves impactos ambientales.

¿A qué países exportas tus productos?

El año pasado comenzamos en Madrid con un showroom privado y aparecimos en varias revistas reconocidas. Planeamos abrir una tienda en el barrio de Salamanca en 2025. Posicionar una marca en Europa es costoso y lleva tiempo, pero la respuesta ha sido positiva. Este año hemos crecido un 10% en facturación gracias a las ventas en España y al valor que los clientes otorgan al sello Fairmined.

Cuéntanos sobre la nueva colección relacionada con el ópalo andino.

Es una campaña que incluye una colección cápsula. El anillo central, llamado ‘Suyai’ (‘esperanza’ en quechua), busca devolvernos el orgullo de ser peruanos. Queremos destacar nuestras riquezas y crear productos con valor agregado. Además, el 30% de las ganancias netas de esta colección se destinarán a CARE, una ONG que trabaja en el empoderamiento de niñas y mujeres en situación de vulnerabilidad.

¿Por qué crees que el ópalo azul puede ser la piedra bandera del Perú?

El ópalo azul es exclusivo de Perú, una piedra preciosa valorada internacionalmente. Hemos visitado su origen en Acari, Arequipa, para mostrar su potencial. Es una gema rara y de alta calidad, pero no se ha promovido adecuadamente. Mientras otros países destacan sus piedras nacionales, en Perú debemos revalorizar esta riqueza, siempre extrayéndola de manera sostenible y artesanal.

¿Cómo alineas el propósito de tu marca con tus valores personales?

Mi propósito de vida es contribuir a un mundo mejor. Mi marca busca ser un medio para generar impacto positivo, promoviendo la minería responsable, el desarrollo del país y el empoderamiento de las personas.