«Sobre 100 industrias pymes con trabajadores registrados a cargo, la actividad en enero se desplomó al 45%», informaron desde ENAC. Además, reportaron que «7 de cada 10 industrias se encuentran operando a menos del 60% de su capacidad industrial disponible».
La capacidad utilizada, en cifras pandémicas
Las cifras actuales se ubican en niveles similares al año 2020, cuando la economía global se vio afectada fuertemente por los efectos del COVID-19, el cual generó una contracción del comercio mundial.
Bilanski, presidente de ENAC, explicó que el dato surge de la combinación de varios problemas que aún están sin resolver «como el cepo a las importaciones y la falta de dólares, la inflación galopante que dejó el Gobierno anterior y que se ha incrementado en diciembre y enero, la brutal devaluación que aplicó el Gobierno actual y la ausencia de un plan económico claro que permita proyectar el desarrollo de las empresas con presupuestos consistentes».
Todo ello hace que el sector pyme se encuentre inmerso en un escenario que Bilinski calificó de «incertidumbre significativa para el empresario industrial» ya que no hay «claridad» en el rumbo productivo del gobierno actual.
Ante esa situación, el titular de ENAC consideró como una posibilidad que la actividad industrial «se planche, uno o dos trimestres, hasta que se despejen algunas variables inciertas de la economía». Sin embargo, señaló que «está claro» que una vez que la industria vuelva a funcionar «habrán menos puestos de trabajo».