Cómo la ganadería brasileña busca nuevos destinos de exportación más allá de China

Analistas cuentan a Bloomberg Línea las perspectivas para el sector y para la carne bovina brasileña en 2025, teniendo en cuenta factores como la demanda del gigante asiático y el nuevo gobierno Trump.
0 Shares
0
0
0
0

Los ganaderos brasileños han diversificado sus destinos de exportación para conquistar nuevos mercados y ampliar los envíos de carne brasileña a regiones distintas de China, que es el principal comprador de proteínas, soja y otros productos agrícolas del país. “La demanda china debe permanecer estable durante la primera mitad de 2025, con la posibilidad de un aumento de las compras a partir de la segunda mitad. Pero para Brasil, este es un punto de cautela: es poco probable que el mercado chino avance y, de hecho, ha demostrado que está cerca de un pico”, dijo el analista de proteína animal de Rabobank, Wagner Yanaguizawa.

Según los analistas consultados por Bloomberg Línea, el gigante asiático debería seguir siendo el principal comprador de carne de vacuno brasileña. Actualmente, cerca del 45% de toda la carne de vacuno consumida en China procede de Brasil, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Hay otros mercados en el radar del sector brasileño, como la carne halal para países musulmanes, Egipto, Chile y Filipinas. Yanaguizawa señaló que hay oportunidades en mercados que aún no se han abierto, pero que buscan carne de alto valor añadido, como Japón y Corea del Sur. Esta sensación de incertidumbre y espera en relación con China se debe también a que, a finales de diciembre de 2024, el país inició una investigación sobre las importaciones de carne de vacuno para entender si el aumento de los envíos procedentes del extranjero perjudicaría al sector nacional. Además, a medida que se agrava la crisis económica del país, surgen dudas sobre el tamaño de la demanda; en cereales, este “golpe” ya se ha dejado sentir. Si, por un lado, el apetito chino ayudó al sector a tener en 2024 un año récord en exportaciones, por otro hace temer por los límites y riesgos de la dependencia.

“Es importante estar atentos a esto [la investigación de China], especialmente sobre cualquier posible suspensión. Hay una historia de barreras comerciales que se han impuesto en un intento de presionar los precios. Pero esta dependencia [entre Brasil y China] debe continuar, ya que hoy en día no hay otro mercado que compense este gigantesco volumen de exportaciones”, añadió Yanaguizawa.