El Ministerio de Hacienda de Brasil presentó el lunes un programa para proteger a los inversores de los riesgos cambiarios en proyectos sostenibles. El programa tiene como objetivo fomentar las inversiones extranjeras en proyectos «verdes» en el país.
El programa contempla varias iniciativas, entre ellas:
- Ofertas de derivados por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a través del Banco Central de Brasil.
- Líneas de crédito del BID por valor de us$2.000 millones de dólares.
- Fondos de garantía.
- Asistencia técnica.
En una conferencia de prensa, el titular del BID, Ilan Goldfajn, destacó que el banco aportará us$3.400 millones de dólares en derivados y us$2.000 millones en líneas de crédito dentro del plan del Gobierno brasileño de cobertura cambiaria. Goldfajn señaló que el programa «es un ejemplo para el mundo» y que «si funciona, y creo que lo hará, sería un modelo para que otros países puedan replicar».
El objetivo del programa es mitigar los riesgos asociados a la volatilidad del tipo de cambio y fomentar las inversiones en proyectos sostenibles. El gobierno brasileño espera que el programa ayude a atraer inversiones por valor de us$10.000 millones de dólares en los próximos cinco años.
El programa ha sido recibido con cautela por algunos sectores. Algunos expertos han expresado su preocupación por el costo del programa para el gobierno brasileño. Otros han cuestionado la eficacia del programa para atraer inversiones extranjeras.
Sin embargo, el gobierno brasileño está convencido de que el programa será un éxito. El gobierno argumenta que el programa es necesario para ayudar a Brasil a alcanzar sus objetivos climáticos y para promover el crecimiento económico sostenible.
El programa es un paso importante en la dirección correcta. Es una señal del compromiso del gobierno brasileño con la lucha contra el cambio climático y con la promoción de la inversión extranjera. El éxito del programa dependerá de una serie de factores, como la eficacia de su implementación y la evolución del mercado global.
