El paro camionero en Colombia, que ya completa cuatro días, y desde ya se empiezan a sentir las graves repercusiones económicas para diversos sectores. Los ganaderos bovinos, por ejemplo, han reportado pérdidas superiores a los $40.600 millones debido a la interrupción en el transporte de productos como la leche. Según la Federación Nacional de Ganaderos, Fedegán, la no recolección de este alimento ha sumado pérdidas de más de $12.700 millones, lo que equivale a aproximadamente 8 millones de litros de leche no distribuidos. Este impacto directo en la industria ganadera es solo una de las múltiples aristas que reflejan las consecuencias del paro.
Por otro lado, las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) también han manifestado su preocupación. La Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Acopi) ha sido clara en su rechazo a los bloqueos viales provocados por los transportadores en protesta por el aumento en el precio del diésel (ACPM). En un comunicado, Acopi destacó que los costos logísticos representan el 36% de los gastos totales para las MIPYMES, y el transporte es un factor clave en esta estructura. Como resultado, el alza en el precio del diésel afecta directamente los costos de producción de industrias esenciales como la agricultura, la minería, la construcción, y el transporte de pasajeros.
Además, Acopi advirtió que los bloqueos han elevado el precio de los productos de la canasta básica, afectando a los consumidores. Las pérdidas para el país se estiman en $300 millones de dólares diarios, debido a las exportaciones detenidas. En este sentido, las empresas más pequeñas, con márgenes de maniobra financiera limitados, son las más expuestas a las fluctuaciones de los precios del combustible y a las interrupciones en la cadena de suministros.
En cuanto a las negociaciones entre el gremio de transportadores y el Gobierno Nacional, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo. El gobierno ofreció un incremento gradual del precio del ACPM, con aumentos mensuales de $200 pesos hasta diciembre. Sin embargo, los transportadores rechazaron esta propuesta, insistiendo en un incremento fijo de $400 pesos hasta el fin del año, con la posibilidad de reevaluar un aumento mayor dependiendo del cumplimiento de los acuerdos.
Mientras las conversaciones continúan, los empresarios evalúan las posibles pérdidas a medida que el paro se prolonga, y los expertos advierten que de no lograrse una solución pronta, se podría generar una crisis en sectores estratégicos de la economía. Ante este panorama, Acopi ha hecho un llamado urgente para evitar más bloqueos y normalizar el flujo vial, subrayando que la estabilidad económica de muchas MIPYMES y, por ende, del país, depende de un sistema de transporte eficiente y funcional.