La llegada de diciembre marca en Colombia el inicio de una de las conversaciones económicas más importantes y sensibles del año: la negociación del aumento del salario mínimo. Este diálogo, que involucra al Gobierno, empresarios y sindicatos, busca establecer el nuevo monto del salario mínimo para 2025, en un contexto de inflación en descenso y desafíos en la reactivación económica del país.
La inflación, medida por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), será un punto clave en las negociaciones. En octubre de 2024, la inflación se situó en 5,41%, reflejando una leve reducción frente al 5,81% registrado en septiembre. La cifra de noviembre, que el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) anunciará próximamente, se convertirá en el “piso” de la negociación, lo que implica que cualquier aumento del salario mínimo no podrá ser inferior a este porcentaje de inflación.
Las expectativas del sector empresarial
Para el sector empresarial, el contexto actual es de precaución, pero también de optimismo moderado. La presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana (AmCham Colombia), María Claudia Lacouture, destacó que la tendencia a la baja en la inflación es positiva para el país, pero insistió en la necesidad de adoptar medidas para garantizar una recuperación económica sólida y sostenible. Entre estas medidas, Lacouture subraya la importancia de reducir aún más las tasas de interés del Banco de la República, que actualmente se encuentran en el 9,75%, para estimular la inversión y el consumo.
Asimismo, Lacouture sugiere el fortalecimiento de alianzas público-privadas, especialmente en sectores generadores de empleo, y considera esencial generar confianza entre los empresarios e inversionistas mediante una comunicación clara de las metas y planes económicos del Gobierno. “Fortalecer la confianza permitirá a los inversionistas estructurar sus negocios con una visión de largo plazo, lo que ayudará a recuperar una senda de crecimiento sostenible”, afirmó la líder gremial.
Posturas divergentes en la mesa de concertación
Como cada año, las expectativas entre sindicatos y empresarios divergen en la mesa de concertación. Según proyecciones de Óscar Cubillos, jefe de la Oficina de Planeación y Estudios Económicos de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), los sindicatos podrían solicitar un aumento del 15,4%, lo que llevaría el salario mínimo a cerca de $1.500.000. Este incremento, de acuerdo con los sindicatos, reflejaría la necesidad de mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores en medio de un costo de vida que sigue siendo alto.
Por su parte, el sector empresarial se inclinaría por una postura más conservadora. Cubillos señala que los empresarios podrían proponer un aumento inicial en el rango del 6,0%, argumentando que un ajuste moderado es necesario para proteger la estabilidad financiera de las empresas, especialmente en un entorno donde los costos operativos han incrementado y la reactivación económica aún enfrenta obstáculos.