La reciente escalada arancelaria impulsada por Estados Unidos no solo reconfigura el tablero del comercio global, sino que también pone bajo presión a economías como la colombiana, altamente dependientes de su relación con el mercado norteamericano. Así lo advierten expertos del sector empresarial y gremial, quienes analizan los efectos de las nuevas tarifas impuestas por Washington a las importaciones desde diversos países, incluyendo Colombia.
Ricardo Triana, director ejecutivo del Consejo de Empresas Americanas, advirtió que el impacto para el país podría sentirse en al menos el 30% del total de exportaciones nacionales, cifra que refleja la magnitud del reto. “Aunque la medida es global, con aranceles más elevados para China y la Unión Europea, para Colombia representa una amenaza concreta a la competitividad de sectores que dependen en gran parte del acceso al mercado estadounidense”, explicó.
El arancel del 10% aplicado a las importaciones colombianas genera una presión directa sobre industrias clave como el agro, el sector manufacturero, el textil y los insumos industriales. “Las empresas con alta exposición al comercio bilateral verán afectadas sus estrategias comerciales. No solo podrían disminuir los volúmenes de exportación, sino que también se enfría la atracción de inversión extranjera directa, un componente vital para el crecimiento económico”, sostuvo Triana.
En esa línea, el directivo afirmó que ve la coyuntura como una oportunidad para reconfigurar las rutas comerciales del país. Colombia podría ganar terreno en nichos desatendidos por países con mayores aranceles, siempre y cuando cuente con capacidad exportadora competitiva. “El caso del sudeste asiático en textiles es un ejemplo. Con esa región fuertemente impactada por los nuevos aranceles, Colombia puede buscar posicionarse si logra reaccionar con agilidad”, añadió.
Por su parte, Javier Díaz, presidente de Analdex, recordó durante el Foro Nacional de Importadores en la ciudad de Medellín, que esta política arancelaria no es nueva, sino una prolongación de las medidas proteccionistas promovidas durante la administración de Donald Trump. Díaz subrayó que este enfoque ha generado distorsiones en el comercio internacional y, en muchos casos, ha resultado contraproducente incluso para el propio EE.UU.
Adicionalmente, el dirigente advirtió que Colombia podría enfrentar mayores tensiones si se presenta un escenario de descertificación en la lucha antidrogas, tema que volverá a evaluarse en septiembre. De concretarse esta posibilidad, el país estaría ante un nuevo frente de riesgo económico y diplomático.