Bancos internacionales respaldan a El Salvador con $620 millones para reformas fiscales y fortalecimiento del sistema de salud

Ambos préstamos forman parte del programa de financiamiento internacional que permitirá a El Salvador recibir hasta us$3,500 millones en apoyo económico.
0 Shares
0
0
0
0

San Salvador. El Salvador ha asegurado financiamiento por un total de us$620 millones provenientes de dos importantes organismos internacionales: el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial. Estos fondos tienen como propósito apoyar la estabilidad fiscal del país y mejorar la atención en el sistema de salud pública.

El BID aprobó un crédito de us$500 millones para respaldar las estrategias del gobierno en materia fiscal y económica, dentro del marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Con estos recursos, se busca garantizar mayor estabilidad en las finanzas públicas, optimizar la recaudación de impuestos, reducir la deuda y fortalecer las reservas internacionales. Asimismo, se pretende reforzar la transparencia en la gestión de fondos estatales.

En paralelo, el Banco Mundial otorgó un financiamiento de us$120 millones para el Proyecto de Mejora de la Atención de Salud en El Salvador (Promas), el cual será ejecutado en los próximos cinco años. Este programa está enfocado en modernizar hospitales y centros de atención médica, mejorar los equipos y optimizar la gestión de los insumos médicos. También se implementará un modelo de atención en red y se impulsará la digitalización de los servicios de salud.

Ambos préstamos forman parte del programa de financiamiento internacional que permitirá a El Salvador recibir hasta us$3,500 millones en apoyo económico. Estas ayudas dependen del cumplimiento de metas fiscales establecidas por el gobierno de Nayib Bukele, quien se ha comprometido a realizar ajustes presupuestarios progresivos.

El gobierno salvadoreño deberá aplicar medidas para incrementar la recaudación fiscal y mejorar la eficiencia del gasto público. Entre los compromisos adquiridos, se prevé la ampliación de la base tributaria y la implementación de nuevos mecanismos de facturación electrónica. Paralelamente, se espera una optimización en la gestión de los recursos estatales, lo que incluye un control más estricto sobre la planilla gubernamental y los subsidios.

El respaldo financiero del BID y del Banco Mundial refleja la confianza de estos organismos en las políticas económicas y sociales de El Salvador. Con estas medidas, se espera fortalecer la estabilidad económica y mejorar la calidad de los servicios básicos para la población.