La República- En un nuevo capítulo dentro de la ya tensa relación comercial entre las dos principales economías del mundo, China anunció este miércoles la imposición de aranceles de 84% a una amplia gama de productos provenientes de Estados Unidos, luego de que este pusiera a regir a media noche el arancel de 104% sobre la segunda potencia mundial. La medida, que entrará en vigor a partir del próximo mes, representa un nuevo capítulo en la guerra , comercial que, pese a altibajos diplomáticos, nunca ha cesado del todo desde sus orígenes en 2018.
El Ministerio de Comercio de China justificó la decisión como una «respuesta necesaria y proporcional» a lo que calificó como «acciones proteccionistas y discriminatorias» por parte de Washington. Aunque el comunicado oficial no detalló los productos exactos afectados, fuentes cercanas al gobierno chino señalaron que los aranceles impactarán principalmente a bienes agrícolas, automóviles eléctricos y componentes tecnológicos.
«Este anuncio no solo es económico, es profundamente político», afirma Liu Wen, analista del Instituto de Relaciones Internacionales de Shanghái. «Pekín está dejando claro que no permitirá que la presión tecnológica de Washington quede sin consecuencias».