La celebración recuerda aquel día de 1900 cuando Louis Lassen, trabajador de un restaurante de New Haven, realizó un plato por pedido especial de un cliente que exigía un plato simple y para comer al paso. La idea del cocinero fue juntar carne, pan, tomate, lechuga y queso, creando así la primera hamburguesa de la historia.
Así fue como usando los ingredientes básicos para un sándwich de carne, Lassen creó lo que ahora conocemos como hamburguesa, y que con el paso del tiempo se convirtió en un referente de la cultura estadounidense.
Fue en la década de los años 50 cuando McDonald’s popularizó este platillo y se expandió por todo Estados Unidos. El restaurante ubicado en San Bernardino, en California, fue pionero y luego se abrieron otros locales.
Con motivo del Día Internacional de la Hamburguesa varias cadenas de comida rápida tienen promociones y ofertan este platillo, si planeas celebrar este día, te recomendamos buscar tu restaurante favorito, ya que algunos, incluso, están regalando producto.
¿Cómo cocinar la hamburguesa ideal?
Existen diversas versiones de cómo hacer una hamburguesa, según los gustos de cada persona. También implica una combinación de buenos ingredientes y técnicas adecuadas que dan como resultado esta preparación deliciosa. A continuación, algunas claves para hacer la hamburguesa ideal de forma casera:
Preparación de la carne: se debe elegir carne molida de calidad. Se recomienda optar por la que es de res y con un contenido de grasa del 20%, ya que es esencial para mantener la hamburguesa jugosa.
Formar las hamburguesas: dividir la carne en porciones de aproximadamente 150-200 gramos (1/3 a 1/2 libra). Formar bolas y aplastarlas suavemente para crear hamburguesas de aproximadamente 2 cm de grosor. Luego se puede sazonar ambos lados generosamente con sal y pimienta antes de cocinarlas.
Cocinar las hamburguesas: se pueden hacer en la sartén o en la parrilla. Es fundamental que en cualquiera de las dos opciones el recipiente esté muy caliente antes de poner las hamburguesas. Se debe cocer a fuego medio-alto durante unos 3-4 minutos por lado. Si se desea incorporar queso a la receta, se debe colocar sobre la hamburguesa el último minuto de cocción para que se derrita.
Tostar el pan: antes de armar la hamburguesa, se recomienda dejar el pan en la parrilla o sartén hasta que esté dorado. Esto ayuda a evitar que este se empape con los jugos de la carne.
Montar la hamburguesa: primero se toma la base del pan y se le coloca una capa ligera de algún aderezo, preferiblemente mayonesa. Luego poner la lechuga para que sirva como una barrera para mantener el pan seco. Ahí es cuando se suma la hamburguesa cocida con el queso. Ato seguido, agregar el tomate, la cebolla morada y los pepinillos. Por último, añadir aderezos adicionales antes de colocar la tapa.
Dejar descansar: se debe permitir que las hamburguesas reposen minutos antes de servir para que los jugos se redistribuyan.
De esa forma se puede crear la clásica hamburguesa, pero esta receta se puede variar según el gusto de cada persona. Por ejemplo, se pueden ajustar los tiempos de cocción según cómo se come la carne. A su vez, se pueden cambiar los ingredientes que se suman a la preparación, como puede ser intercambiar la carne por legumbres para crear una hamburguesa vegetariana.