Amparo Canales, presidenta del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), ha hecho un llamado urgente a las autoridades para encontrar una solución a la crítica situación que enfrenta la industria camaronera del país.
La falta de un mercado para exportar el producto ha generado una serie de graves consecuencias para los productores y la economía nacional.
Canales enfatizó la necesidad de buscar mercados alternativos para el camarón hondureño. «Todavía no se ha definido una solución a la falta de mercado para el camarón hondureño», señaló, y esta situación ha tenido un impacto devastador en el sector.
México, el segundo destino más importante para la exportación del camarón hondureño, cerró sus fronteras al producto a finales de enero de 2024. Esta medida, tomada por la Dirección General Jurídica de Aduanas de México debido a una supuesta «invasión de producto pirata», ha dejado a los productores hondureños sin uno de sus principales mercados.
Las consecuencias de esta crisis no se han hecho esperar. La industria camaronera ha experimentado una pérdida de hasta 10 mil empleos, y el país en general ha visto una disminución de 40.5 millones de dólares en las exportaciones durante el año 2023. De no encontrar una solución pronta, este panorama podría empeorar aún más en 2024.
Ante esta grave situación, Canales ha hecho un llamado a las autoridades a tomar medidas inmediatas para:
- Identificar y abrir nuevos mercados para el camarón hondureño.
- Gestionar con las autoridades mexicanas la reapertura del mercado para el producto hondureño.
- Brindar apoyo a los productores de camarón afectados por la crisis.
- Implementar medidas para fortalecer la competitividad del sector camaronero hondureño.
La crisis del camarón hondureño es un problema urgente que requiere una respuesta rápida y efectiva por parte del gobierno.