San Pedro Sula. La situación laboral en Honduras se torna cada vez más crítica con el anuncio de la posible suspensión de operaciones de dos empresas más, lo que suma a miles de trabajadores al borde del desempleo y la precariedad.
Lamentable realidad:
- Más de 2.500 trabajadoras afectadas: Las empresas Delta Apparel y Delta Cortés, que emplean a más de 2.500 mujeres, han anunciado una suspensión temporal de sus operaciones por 120 días.
- Incumplimiento legal: Las organizaciones denuncian que estas empresas no están siguiendo los procedimientos legales para la suspensión de actividades, dejando a las trabajadoras en indefensión.
- Ciclos de inestabilidad: La representante de Codemuh, María Luisa Regalado, lamenta que este tipo de suspensiones se han vuelto recurrentes en la industria maquilera, generando un ciclo de inestabilidad y desempleo para las trabajadoras.
- Falta de protección: Las mujeres afectadas se quedan sin empleo, salario, seguridad social y sin la posibilidad de defender sus derechos.
- Violencia policial: La protesta pacífica de las trabajadoras en Villanueva fue reprimida violentamente por la policía, evidenciando la falta de protección a sus derechos laborales y sociales.
- Ausencia de las autoridades: Se critica la falta de acción por parte de la ministra del Trabajo, quien no ha tomado medidas para garantizar la investigación de las causas de estas suspensiones ni para proteger a las trabajadoras.