México. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció que, a partir del 1 de enero de 2025, tanto la gasolina Magna como el diésel contarán con un estímulo fiscal aplicado al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS). El anuncio fue formalizado mediante un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Sin embargo, la gasolina Premium continuará sin recibir este beneficio, como ha sido el caso desde octubre de 2023.
Los porcentajes del estímulo fiscal, vigentes del 1 al 10 de enero de 2025, serán los siguientes:
- Gasolina Magna: 3.57%, equivalente a 0.23 pesos por litro.
- Diésel: 0.37%, equivalente a 0.02 pesos por litro.
- Gasolina Premium: No tendrá estímulo fiscal.
Con estos ajustes, los impuestos que los consumidores deberán pagar por litro de combustible serán los siguientes:
- Gasolina Magna: 6.22 pesos por litro (incremento desde los 6.17 pesos).
- Diésel: 7.06 pesos por litro (incremento desde los 6.78 pesos).
- Gasolina Premium: 5.45 pesos por litro (incremento desde los 5.21 pesos).
El incremento del IEPS, establecido en un 4.5% a partir del 1 de enero, responde a la política fiscal de la SHCP para estabilizar los ingresos derivados de este impuesto. Además, el estímulo fiscal busca contrarrestar parcialmente el impacto de la volatilidad internacional en los precios de los combustibles.
Precios de la gasolina al cierre de 2024
Este martes 31 de diciembre, los precios promedio nacionales sin aplicar los nuevos estímulos fiscales son:
- Gasolina Magna: us $1.20 por litro.
- Gasolina Premium: us $1.27 por litro.
- Diésel: us $1.29 pesos por litro.
¿Qué es el IEPS y el estímulo fiscal?
El IEPS es un impuesto indirecto que se aplica a productos como gasolinas, alcohol, tabaco y otros bienes, cuyos costos son trasladados al consumidor final. Para reducir el impacto de las fluctuaciones internacionales, la SHCP determina semanalmente un estímulo fiscal basado en factores como el tipo de cambio, precios de referencia internacionales y costos logísticos. Este mecanismo permite amortiguar parcialmente los aumentos en el precio de los combustibles.