El desacoplamiento comercial entre Estados Unidos y China está siendo parcialmente compensado por el flujo de comercio e inversión a través de terceros países, especialmente México y Vietnam, según un informe reciente del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El estudio, titulado «La geopolítica y su impacto en el comercio global y el dólar», revela que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han provocado una disminución significativa en la participación de ambos países en las importaciones y exportaciones mutuas. Entre 2017 y 2023, la participación de China en las importaciones estadounidenses cayó un 8%, mientras que la participación de Estados Unidos en las exportaciones chinas disminuyó alrededor del 4%.
Sin embargo, el informe destaca que el desacoplamiento no ha tenido un impacto aún mayor en el comercio global debido al papel de países «conectores» como México y Vietnam. Estos países han servido como intermediarios, facilitando el flujo de comercio e inversión entre Estados Unidos y China, lo que ha ayudado a amortiguar el impacto económico global del desacoplamiento directo entre las dos potencias.
El FMI advierte que el camino futuro dependerá de las políticas que adopten los países. Algunos podrían optar por aceptar este desvío del comercio e inversión para preservar los beneficios de la integración económica, mientras que otros podrían continuar imponiendo barreras comerciales, lo que podría romper aún más los vínculos entre países.
No obstante, el FMI subraya la importancia de preservar y fortalecer el sistema de comercio global basado en reglas multilaterales, así como el sistema monetario internacional. Aunque algunas economías emergentes y en desarrollo podrían beneficiarse de la fragmentación en cierta medida, el grupo en su conjunto se vería desproporcionadamente afectado por formas más graves de fragmentación.