México. Expertos de la consultora financiera Moody’s Analytics señalan que México es el país más expuesto a los cambios en la política comercial y migratoria de la administración de Donald Trump. De acuerdo con Alfredo Coutiño, director para América Latina de la firma, la economía mexicana perderá alrededor de un punto porcentual del Producto Interno Bruto (PIB) en 2025 debido al impacto de la política tarifaria de Estados Unidos y los ajustes fiscales internos aplicados por el gobierno federal.
Durante la presentación del panorama de crecimiento para América Latina, Coutiño mantuvo su pronóstico de crecimiento de 0,6% para México en 2025, cifra que ya había sido estimada en noviembre pasado. Además, destacó que los aranceles impuestos por Estados Unidos tendrán un impacto significativo en el comercio y en las oportunidades relacionadas con el nearshoring. «La incertidumbre también se ve reforzada por reformas constitucionales, como las que afectan al poder judicial y a los órganos autónomos», agregó.
Por otro lado, Brasil enfrentará el mayor golpe económico en la región, debido a la desaceleración simultánea de la demanda en Estados Unidos y China, así como a las secuelas de su propio ajuste fiscal, señaló el análisis de Moody’s.
Una encuesta realizada por Citi reveló que el consenso del mercado espera un crecimiento del 1% para México este año, aunque con una amplia variación en las proyecciones. Mientras que algunos estrategas, como Banamex, anticipan un avance mínimo de 0,2%, otros, como Signum Research y Masari, prevén un crecimiento de hasta 1,8%.
Esta estimación se encuentra dentro del rango proyectado por el Banco de México, que oscila entre 0,4% y 2%, pero queda por debajo de las expectativas oficiales del gobierno federal, que planteó un crecimiento de entre 2% y 3% en sus Criterios Generales de Política Económica 2025.
En cuanto a la inflación, los analistas encuestados por Citi prevén que cerrará 2025 en 3,91%, entrando por primera vez en el rango objetivo del Banco de México. Para el mes de enero, se espera una inflación de 0,27%.
A pesar de las condiciones adversas, los expertos coinciden en que el panorama económico de México en 2025 estará determinado por la capacidad del país para adaptarse a los cambios en las políticas internacionales y a las reformas internas.