México. La decisión del presidente Donald Trump de retirar a Estados Unidos del Acuerdo Fiscal Global de la OCDE, que busca establecer un impuesto mínimo del 15% para las multinacionales, ha generado preocupación en México. Este movimiento responde al interés del mandatario por reducir la tasa corporativa en Estados Unidos del 21% actual al 15%, lo que podría atraer inversiones extranjeras al país vecino y restar competitividad al territorio mexicano.
Manuel Herrera, presidente de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), explicó que esta reducción haría que la tasa efectiva en Estados Unidos, después de deducciones, sea aún menor, mientras que en México la tasa nominal corporativa permanece en 30%. «Hace diez años, la tasa de Estados Unidos era del 35% y ahora, con una potencial disminución al 15%, los inversionistas pueden preferir trasladar operaciones a ese país», señaló Herrera.
El Acuerdo Fiscal Global de la OCDE, respaldado por la administración previa a Trump, busca garantizar una recaudación mínima en jurisdicciones internacionales para las multinacionales. Sin embargo, Trump ha rechazado el marco normativo propuesto, argumentando que limita la capacidad de Estados Unidos para implementar políticas fiscales favorables a sus empresas. Esta política se suma a una tendencia de aislamiento internacional por parte de su administración, que ya había retirado al país del Acuerdo de París y de la Organización Mundial de la Salud.
El posible escenario de una tasa corporativa más baja en Estados Unidos amenaza con desincentivar el fenómeno del nearshoring en México, donde empresas internacionales buscaban relocalizarse aprovechando su cercanía con el mercado estadounidense. Gloria Rocío Estrada Antón, presidenta de la Comisión Técnica de Comercio Exterior del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), advirtió que «Estados Unidos busca un backshoring, atrayendo directamente a las empresas a su territorio, dejando fuera a México y otros países latinoamericanos».
Responder con una reducción de la tasa de ISR en México parece poco viable, ya que este impuesto representa el principal ingreso público del país. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda, el ISR ha pasado de aportar el 24.1% de los ingresos públicos en 2014 al 35.7% en 2024. A pesar de incentivos como la depreciación acelerada para nuevas inversiones, expertos consideran que no es suficiente para contrarrestar la competitividad fiscal de Estados Unidos.
«Si la tasa corporativa en Estados Unidos se reduce a 15%, una empresa mexicana podría encontrar más conveniente establecerse allá por los menores costos fiscales», concluyó Herrera