Hasta noviembre, el valor promedio de compraventa de la divisa se desplomó un 48% desde enero, cuando el promedio era de 41 guaraníes por peso, según datos del Banco Central del Paraguay (BCP). En el mercado cambiario, la divisa argentina se mantiene por debajo de los 10 guaraníes a la venta desde hace varios meses, reflejando una depreciación del 78%.
En los últimos años, la preocupación por la depreciación del peso argentino ha ido en aumento, siendo especialmente notable a partir de 2013. No obstante, a partir de 2019, esta tendencia ascendente ha tomado un giro más pronunciado. En el segundo semestre del 2023, el temor por los planes de dolarización de Argentina generó pánico en el mercado, y muchas casas de cambio comenzaron a rechazar la moneda.
Incluso, ante la tensión que generó esta situación, el propio presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Carvallo, aclaró que el guaraní es la única moneda que «todos estamos obligados a recibir porque es la moneda que emite y custodia el Banco Central y tiene curso legal en el país».
Emil Mendoza, presidente de la Asociación de Casas de Cambio (ACC), señaló en una entrevista que, de alguna manera, el mercado legal se apaciguó en el último mes del año debido al manejo del contrabando, que afectaba principalmente a los operadores formales del mercado de divisas.
Aunque desde el sector celebran la disminución del ingreso de productos ilegales al país, se debe tener cuidado con el acomodamiento que genera la infraestructura de control para que se reactive este flagelo, volviendo a viejas prácticas que inducen nuevamente al contrabando. «Esta es una maquinaria enorme que movía grandes capitales. Y esos capitales van a seguir trabajando con la metodología que trabajaban antes», alertó.
«El sueldo mínimo en Argentina no subió, los productos son los que valen más. Los mercados buscan acomodarse. Cuando el supermercado remarca sus mercaderías y no vende porque la población no puede comprar, esos precios naturalmente empiezan a bajar», señaló.