Lima. Según un reciente estudio de Bumeran, el 53% de los peruanos se siente frustrado por no trabajar en la profesión que soñaban en su infancia. El informe, titulado “¿Trabajas de lo que soñabas?”, revela que solo el 38% de los trabajadores peruanos ejerce la ocupación que deseaba de niño, mientras que el 62% ha terminado en un campo laboral distinto. Este fenómeno se refleja de manera similar en otros países de la región, como Argentina, donde el 76% de los encuestados afirma no trabajar en lo que soñaba.
Insatisfacción laboral en Perú
Además de la frustración, el estudio señala que el 72% de los trabajadores en Perú no se siente satisfecho con su empleo actual. Esta insatisfacción proviene de diversas razones: un 56% de los encuestados estudió una carrera relacionada con su sueño de infancia, pero 63% de ellos no trabaja en un área vinculada a su formación. A pesar de esta desconexión, el 30% se siente agradecido por tener empleo, aunque no esté relacionado con su campo de estudio o aspiración.
Miguel Bechara, director comercial de Bumeran Perú, señaló que “la frustración laboral es una tendencia significativa en el Perú, donde más de la mitad de los trabajadores no han alcanzado sus aspiraciones profesionales”. Aunque esta situación también se presenta en otros países, el caso peruano resalta por el impacto en la satisfacción laboral de los empleados.
Cambios en los sueños profesionales
El estudio también revela que el 41% de los peruanos no siente frustración debido a que sus intereses han cambiado con el tiempo, inclinándose hacia otras profesiones. Sin embargo, el 80% de los encuestados manifestó que, de poder hacerlo, cambiarían su ocupación actual por aquella que soñaban en su niñez.
A nivel de género, las aspiraciones profesionales en la niñez variaron entre los encuestados. Entre las mujeres, el 15% aspiraba a ser ingeniera, el 12% médica, y el 9% veterinaria, mientras que, en la actualidad, el 43% trabaja como vendedora y el 23% como ingeniera. En los hombres, el 25% soñaba con ser ingeniero y el 10% médico, aunque actualmente el 32% ejerce la ingeniería y el 26% trabaja como vendedor.