En un contexto global marcado por tensiones geopolíticas, crisis climáticas y exigencias regulatorias cada vez más complejas, el sector agroalimentario de las Américas ha decidido dar un paso adelante para liderar con visión estratégica. Durante el II Encuentro de Federaciones Agrícolas de las Américas, celebrado en San José, Costa Rica, una veintena de organizaciones de 15 países suscribieron, junto con el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), una declaración histórica que busca posicionar a la región como un actor clave en la transformación de los sistemas agroalimentarios globales.
El encuentro, coorganizado por el IICA y la Federación de Cámaras del Agro (FECAGRO), congregó a más de 50 representantes del sector agropecuario, la academia, organismos multilaterales y expertos internacionales. El objetivo: construir una agenda común para una agricultura más productiva, sostenible, resiliente y con fuerte presencia internacional.
Una agenda hemisférica para enfrentar desafíos comunes
La declaración firmada durante el foro enfatiza la necesidad de responder de manera articulada a los retos que enfrentan los sistemas agroalimentarios, como las medidas comerciales unilaterales bajo justificación ambiental, las crecientes exigencias regulatorias y los efectos del cambio climático. Frente a estos desafíos, los líderes agrícolas de la región impulsan una nueva narrativa que reconozca al agro como parte de la solución global, destacando su papel en la seguridad alimentaria, la salud del planeta y la generación de bienestar social.
Es de llamar la atención encontrar tantas similitudes en cuanto a las problemáticas y los retos que enfrentamos ante la amplia diversidad de países y políticas públicas que están establecidas en cada uno de los Gobiernos.
Como Consejo Nacional Agropecuario participamos en representación de México, señalamos la imperiosa necesidad de revalorar la importancia que representa el sector agroalimentario, la producción de alimentos, de las y los productores en cada una de las naciones, tanto para los Gobiernos, como la población en general.
El garantizar el abasto de alimentos para la creciente demanda de la población es quizás el mayor reto que enfrenta la humanidad, es por ello por lo que las políticas públicas y privadas deben de estar enfocadas a elevar la productividad y hacerlo de manera sustentable.
La Federación de Cámaras Agricolas en este marco, solicitó el apoyo del IICA para establecer una red regional de federaciones agrícolas que permita intercambiar experiencias, generar cooperación técnica y fortalecer la incidencia internacional de las Américas.
Voces con visión global: ciencia, diplomacia y sostenibilidad
Durante el foro se ofrecieron cuatro conferencias magistrales que delinearon el pensamiento estratégico del agro de las Américas. Kip Tom, Exembajador de Estados Unidos ante agencias alimentarias en Roma, reflexionó sobre el vínculo entre seguridad alimentaria y soberanía nacional: “Si una nación no tiene seguridad alimentaria, nada más importa: ni la economía, ni la diplomacia. La agricultura es la base de todo”
Por su parte, Renata Cristaldo, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Paraguay, abordó la necesidad de responder colectivamente a regulaciones unilaterales con impacto comercial. Enfatizó que “el comercio debe ser una herramienta para el desarrollo sostenible” y que el IICA desempeña un rol clave como articulador regional y técnico.
Rattan Lal, experto mundial en salud del suelo y Premio Mundial de la Alimentación, presentó el enfoque de agricultura regenerativa como vía para enfrentar la crisis climática. “América Latina tiene el potencial de liderar esta transformación global. La agricultura regenerativa no solo captura carbono, también reconstruye ecosistemas”
Finalmente, Manuel Otero, director general del IICA, urgió a construir una narrativa agrícola basada en ciencia, innovación y sostenibilidad. “Las Américas, con su peso en la producción de alimentos y biodiversidad, están llamadas a liderar una transformación agroalimentaria que aporte valor económico, social y ambiental al mundo”
Un continente que alimenta al mundo
Con más de 20 millones de productores agrícolas y el 30% de los alimentos que se consumen globalmente, las Américas representan una plataforma estratégica para la seguridad alimentaria mundial. Sin embargo, su competitividad no depende únicamente del esfuerzo en el campo, sino también de contar con reglas de comercio justas, marcos regulatorios basados en ciencia, acceso a tecnología e integración regional.
El llamado de este foro es claro: unidad, cooperación efectiva y liderazgo técnico y político. La agricultura del continente tiene el potencial de ser no solo el granero del mundo, sino también un actor de cambio frente a los desafíos globales.
En tiempos de incertidumbre, la voz unificada del agro de las Américas ofrece una visión de futuro basada en la colaboración regional, el diálogo multilateral y el poder transformador del campo.
Cinco pilares estratégicos:
Entre las conclusiones de este importante y trascendente Encuentro se destacan los siguientes:
- Revalorizar el rol del productor como eje de la transformación agroalimentaria.
- Fortalecer la innovación, la ciencia y el uso de tecnología para una agricultura más eficiente y sostenible.
- Consolidar alianzas público-privadas que permitan articular políticas integradas.
- Impulsar una agricultura regenerativa, con énfasis en la salud del suelo y captura de carbono.
- Unificar la voz del continente para incidir con mayor fuerza en foros multilaterales.
Como Consejo Nacional Agropecuario daremos seguimiento a estos pilares estratégicos, trabajando conjuntamente con nuestro gobierno, con las demás organizaciones de productores del sector agroalimentario y demás actores , con el objetivo fundamental no solo de garantizar el abasto suficiente de alimentos para toda la población, sino además aprovechar las oportunidades que nos ofrece este importante sector, con los beneficios que esto conlleva en el crecimiento económico, la generación de empleos, el desarrollo rural y un mayor bienestar para todos.