La Junta Directiva del Banco de la República en cabeza de Leonardo Villar y exceptuando al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, compareció ante las comisiones económicas del Congreso de la República para presentar su informe de gestión.
En su detallada exposición, Villar desestimó la noción de que el aumento de las tasas de interés por parte del Banco de la República fuera la causa principal de la fuerte desaceleración económica del año pasado, que finalizó con un modesto crecimiento del 0,6%.
«Desde mediados de 2022, anticipamos una desaceleración significativa, con proyecciones de crecimiento cercanas al 1% en 2023. Aunque el resultado fue menor a nuestras expectativas, la diferencia no se atribuye principalmente a la política monetaria», afirmó Villar ante las comisiones terceras del Congreso.
El gerente del Banco de la República explicó que si bien la política monetaria contribuyó a reducir el crecimiento del consumo, este efecto estaba dentro de lo previsto. Destacó que el consumo creció un 1,1% en 2023, mientras que la proyección del Banco era del 1%. Sin embargo, señaló que la caída más pronunciada se registró en la inversión.
Villar atribuyó la disminución de la inversión a factores más allá del aumento de las tasas de interés, mencionando la incertidumbre en el sector privado, particularmente en áreas como la salud. Subrayó que «la caída de la actividad se explicó por un desplome fuerte de la inversión que va mucho más allá que el aumento de la tasa de interés».
El informe también puso de relieve las críticas al Gobierno nacional por políticas que impactaron negativamente en la inversión, como la reforma a la salud, que no logró pasar en el Congreso y ahora se intenta implementar por decreto, así como las vigencias futuras para las obras viales.
Villar comparó el incremento de las tasas de interés en Colombia con los de Chile y Perú, señalando que, a diferencia de estos países, en Colombia se observó una caída significativa en la inversión.
El análisis detallado proporcionado por el Banco de la República arroja luz sobre los complejos factores que contribuyeron a la desaceleración económica del país el año pasado, alimentando el debate sobre las políticas necesarias para revitalizar el crecimiento en el futuro.